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miércoles, 13 de agosto de 2008

Hugo J. Faría // ¿Cómo llegamos aquí?

Este artículo me pareció excelente para combatir la ignorancia que abunda aquí en Venezuela.

tomado de eud.com

Sugiero que restablezcamos el capitalismo salvaje en Venezuela

En la presentación del libro de mi buen y querido amigo Maxim Ross titulado "¿Capitalismo salvaje o estado depredador?" le escucho afirmar que en Venezuela no hemos tenido capitalismo y algunos empresarios acumulan riqueza a base de mercantilismo. ¡Bingo! Felicito a Maxim por la entereza de carácter necesaria para hacer públicamente estas afirmaciones.

Añadiría, sin embargo, que entre 1920 y 1957 Venezuela era de los países del mundo que más crecían. Tanto que para 1960 un trabajador venezolano en promedio ganaba más que un trabajador australiano, canadiense y suizo. ¿Qué nos pasó?

El gobierno de Pérez Jiménez estatifica la Cantv, funda Sidor y el Instituto Venezolano de Petroquímica hoy conocido como Pequiven. Establece el estado hotelero con la Conahotu y crea varios bancos de fomento regional. Estos eventos marcan nuestros primeros pasos hacia el socialismo en el siglo XX. A pesar de ello el crecimiento del ingreso real por habitante durante el período 1950-57 fue del 5.4% interanual, similar al de los milagros económicos asiáticos.

El gobierno del residente Betancourt funda Cordiplan, una oficina de planificación central inspirada en el modelo soviético. Realiza una reforma agraria cuya retórica era la lucha contra el latifundio y a los nuevos "propietarios" le entregó títulos de uso. Le pone serios obstáculos a la inmigración europea que tanto bienestar nos ha proporcionado. Funda la OPEP, un cartel, crea la CVP y elimina la política de nuevas concesiones en el sector petrolero. (Para la época teníamos el 15% del mercado mundial petrolero, hoy tenemos menos de un 3%).

Las tasas impositivas a las personas naturales las triplica, incrementándolas del 12% al 36% e insertando numerosos tramos que hacían innecesariamente complejo el sistema tributario. El gasto público aumenta y disminuye el gasto en inversión. Devalúa el bolívar y establece un control de cambios. Finalmente, establece controles de precios sobre viviendas alquiladas, paralizando la producción de viviendas para alquilar y contribuyendo a la "ranchificación" del país.

El gobierno del presidente Leoni profundiza los controles de precios, afianza la política de sustitución de importaciones encarecedora de la vida, (mercantilismo), y fortalece los sindicatos propiciando el desempleo. El gobierno del presidente Caldera fundamentalmente mantuvo el status en materia económica. La tasa de crecimiento para la década de los sesenta promedió 1.74%.

El gobierno del presidente Pérez, estatifica al Banco Central de Venezuela el cual tenía una participación accionaria privada de un 49% y nombra a varios de sus ministros en el directorio del BCV. (Adiós a la autonomía del banco). Además estatificó el hierro y el petróleo, (más socialismo), comenzaron a aparecer las tribus judiciales, inaugura los decretos de salario mínimo inductores de desempleo e inicia las gavetas bancarias. Aumentó sensiblemente la deuda externa, (a pesar del boom de precios petroleros), aumentó el gasto público y comenzó a acelerarse la inflación. La tasa de crecimiento para la década de los sesenta promedió 0.76% negativo.

El gobierno del presidente Herrera aumenta la deuda externa e inicia uno de los procesos más nefastos para el bienestar de los pobres: el círculo perverso de devaluación e inflación. El gobierno del presidente Lusinchi recoge los vicios del pasado y quizás un elemento emblemático de su gobierno es la corrupción y la impunidad. Recordemos a Recadi. La tasa de crecimiento de la década de los ochenta promedió 1.88% negativo.

El segundo gobierno del presidente Pérez intenta corregir algunas de las distorsiones de nuestra economía. Lamentablemente perdió el apoyo popular fundamentalmente porque no dejó de atracar a la población con alta inflación y devaluación. Condición necesaria para ser popular es crecer con desinflación o baja inflación. Este es el caso de Reagan, Clinton, Ménem, Cardozo, Fujimori y ahora Uribe.

El gobierno del presidente Caldera vuelve a los controles y comete también el error político de no estabilizar los precios. La tasa de crecimiento durante la década de los noventa promedió 0.08% negativo.

En síntesis, durante estos años destruimos el capitalismo, contribuyendo sensiblemente al estancamiento crónico de la economía y por tanto propiciando el bien documentado aumento de los pobres, (el ingreso por habitante hoy es inferior al de 1957), y el surgimiento del gobierno del presidente Chávez. Es importante destacar que los pobres que votan por el presidente Chávez no los engendró él, los creamos en el pasado.

Con estos planteamientos deseo llamar a la reflexión. No tengo nada personal en contra de adecos, copeyanos y "empresaurios". Pero como le escuché preguntar a Nicomedes Zuloaga, el 2 de agosto cumplió dos años en el cielo, "¿dónde está el arrepentimiento y propósito de la enmienda?".

Sugiero que restablezcamos el capitalismo salvaje en Venezuela. Lo de salvaje, por cierto, es porque eleva salvajemente el ingreso de la población.

hjf1750@gmail.com

1 comentario:

  1. ¿Qué es esto? ¿Cómo es eso de que el BCV era 49% privado? ¿Hay alguna fuente que respalde eso?

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